En la obra Corps Noir, Gladyszewski elige convertirse en el medio del mensaje, exponer su yo interior y producir un explosivo autorretrato basado en la complejidad de su identidad y las construcciones fantasmagóricas de la psique. Poderosas imágenes fetales y eróticas se impregnan en nuestra retina, el padre sirve como materia prima en la que el hijo buscará su identidad, su autoimagen y algunas referencias sobre las que construir su virilidad
Corps Noir es un autorretrato coreografiado del artista Stéphane Gladyszewski, una obra de arte escénica donde su cuerpo, los objetos que dispone y las imágenes proyectadas en ellos, despiertan nuevas emociones.
Esta pieza es un bazar del subconsciente y de la memoria donde los objetos y el cuerpo del artista (que sirve de lienzo) muestran diferentes texturas, imágenes y voces que se encuentra en algún lugar entre lo sólido y lo líquido, las pantallas heladas, el hielo y el agua, el calor y el frío, la torpeza y la transparencia: Metáforas de identidad transmitidas por una tecnología de vanguardia que permite a Gladyszewski superponer, incrustar, fusionar y emocionar.
Un espectáculo con un lenguaje surrealista propio en el que combina la materia, el cuerpo y los sueños hechizantes.