Y después, cuando ya todas las fiestas han terminado, solo hay que recoger los adornos y accesorios de la fiesta y, quemándolos, hacer otra fiesta.
(Sans soleil. Chris Marker)
Estamos cansados. El sol brilla fuerte y no parece importarle nuestro cansancio. Por eso hay que mirar hacia arriba y quemarnos un poco y abrazar. Y también hay que hacer el esfuerzo de desconectar. Apagar la tele y coger un libro o sumergirnos en alguno de los valiosísimos festivales de cine que siguen adelante. Desconectar del bucle de noticias. Será un invierno duro, sí, pero está en nuestra mano aprovecharlo y volcarnos en el cariño y la delicadeza. Así que aún podemos seguir el aroma de las castañas asadas por la calle. Así que aún podemos subir el volumen de la música y bailar hasta el mareo.
Así que aún podemos seguir volcando palabras y deseos por aquí, dice Laura y todo el equipo de Le Cool Madrid.
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//imagen de Alba Albet
