Luce el sol en el cielo de Madrid, ese que todo el mundo menciona sin haber estado nunca en él. Hay un atajo para llegar y su última parada se encuentra en el Hotel Room Mate Óscar de Chueca, donde se ofrece la posibilidad de vivir uno de esos momentos inolvidables que esta ciudad nos reserva. Un lujo asequible donde lo importante es sentir: el cielo, la brisa, la calma y la delicias que manan de un brunch francés con ganas de cautivarte con sus esencias y sabores sofisticados. Nosotros tuvimos la oportunidad de bucear en ese cielo cristalino, admirar la belleza de Madrid y degustar lo mejor del país vecino en una terraza diseñada para soñar. En sus ambientaciones firmadas por el interiorista Tomás Alía no es necesario cerrar los ojos para entrar en un mundo idílico y bello. Su decoración cálida y al mismo tiempo minimalista nos acuna en medio de un pedacito de cielo.
Tras saborear las vistas y un sabroso cocktail de G-Vine es el momento de empezar una velada francesa rendida al maridaje de la cocina francesa con cocktails selectos e irresistibles. Nada mejor para empezar a perderse por Francia que dejarte llevar por el sabor de un exquisito croissant. Ante tus ojos tendrás tantas virtudes culinarias a cargo de Con dos fogones que tendrás que frenar tu papilas gustativas. Corren el riesgo de revolucionarse ante los sabores del exquisito brunch francés del Óscar. Yo me decanté por un quiche lorraine maravilloso, vichyssoise, créme brulée, salmón con salsa holandesa y una ternera suculenta, de entre los más de 20 delicatessen presentes. Una vez saciado mi apetito, me dejé llevar por los encantos del mejor combinado de Spritz de la ciudad poniendo el broche de oro a una velada única en el cielo de Madrid. No todos los días logras contentar a cada uno de tus sentidos.