Hay lugares y lugares, pero de repente te das cuenta de que en la ciudad en la que has vivido siempre hay sitios desde los que es posible que los árboles te dejen ver el bosque, porque son enclaves privilegiados a los que subirse a ver la ciudad con la luz del atardecer o los primeros rayos de sol por la mañana. Esto es lo que ocurre en la Terraza del Santo Domingo. Con solo estas maravillosas vistas, la incursión habrá merecido la pena… pero es que además en la Terraza del Santo Domingo -llamada así por el hotel en el que se sitúa- se puede degustar unas de las mejores comidas tradicionales del distrito centro a un precio más que razonable teniendo en cuenta del lugar del que hablamos.
Tan solo tendremos que subir hasta la séptima planta, eligiendo nuestra mesa favorita en la azotea o quizá un poco más arriba, asomándonos casi sin red a un Madrid que parece mirarnos mientras tomamos un Verdejo, un Albariño o un estupendo y refrescante cocktail. En las alturas, todo sabe mejor. La terraza cuenta con una extensa carta con plato de cuchara del día o cocido los findes -¡planazo!-, y también menú degustación si no queremos pensar, alucinando con el azul del cielo. Entrantes como ensalada de pimientos ahumados con ventresca y cebolla morada, croquetas variadas –puerros, gambas, bacalao o las de jamón, que nos parecieron irresistibles- o tostas; entre los platos principales destacan el bacalao Orly con pimientos del piquillo flambeados al Gran Marnier y tapenade de aceitunas negras, si es que sois más de pescado, o el irresistible cochinillo deshuesado a baja temperatura con puré de patata, si os tira más Castilla; aunque también puede estar bien un meloso risotto de boletus con estupendo sabor a monte, a gusto del consumidor.
Tendremos que volver, porque nos quedamos con ganas de hamburguesa, pero echando un ojo a la mesa de al lado descubrimos la de costillar a baja temperatura, que tiene pintón. De postre, un cremoso tiramisú, por ejemplo, y a estirar la tarde con el café, que en la Terraza del Santo Domingo se está de cine…y cuando vuelvan sus desternillantes monólogos, todavía se estará mejor.
Pero aún hay más, si coincide que es martes y esperáis hasta las 19h, habrá mucho humor y muchas risas, porque ya están de regreso los “Martes de monólogos”, un certamen muy esperado. Serán actuaciones de cerca de una hora con algunos de los monologuistas que ya participaron en la primera edición del concurso. El último martes de abril, como broche final al mes primaveral, se celebrará un concurso en el que tres nuevos humoristas se batirán en una sesión que se retransmitirá en streaming desde el Instagram @terrazasantodomingo y donde tanto los asistentes en directo como los espectadores de la red social podrán votar por su favorito. El ganador de la noche recibirá un premio de 100 € en metálico y una invitación para dos para comer o cenar en este espacio. ¡Muchas risas y mucha suerte!